Disfunción eréctil: Guía para mujeres
La disfunción eréctil, a menudo llamada impotencia, es una afección común que afecta a hombres de todas las edades, aunque es más frecuente con la edad. Se caracteriza por la incapacidad de lograr o mantener una erección lo bastante firme para mantener relaciones sexuales. Esta afección puede tener un importante impacto emocional y psicológico tanto en el individuo como en su pareja.
Estadísticas y prevalencia
Las estadísticas muestran la prevalencia de la disfunción eréctil. Según el Massachusetts Male Ageing Study, aproximadamente el 52 % de los hombres de entre 40 y 70 años experimentan algún grado de disfunción eréctil. Además, la prevalencia de la disfunción eréctil aumenta con la edad, afectando hasta al 70 % de los hombres mayores de 70 años. Sin embargo, es importante reconocer que la disfunción eréctil no es solo un problema del envejecimiento; los hombres más jóvenes también pueden padecerla debido a una serie de factores físicos y psicológicos.
¿Cómo puede una mujer ayudar a un hombre con disfunción eréctil?
Cuando una pareja tiene problemas de disfunción eréctil, esto puede influir en ambos miembros de la relación. Como compañera solidaria, la mujer puede tomar medidas proactivas para ayudar a su pareja y superar juntos este reto. Desde el fomento de la comunicación abierta hasta la exploración de formas alternativas de intimidad, he aquí algunos consejos para las mujeres sobre cómo comportarse y cómo proporcionar un apoyo significativo a sus parejas que se enfrentan a la disfunción eréctil.
✓ Comunicación abierta: La comunicación abierta y sincera con su pareja es esencial. Anímele a hablar de sus sentimientos y preocupaciones sobre la disfunción eréctil. Hágale saber que usted está ahí para apoyarle y asegúrele que esta afección no afecta a sus sentimientos por él ni a su relación.
✓ Reduzca la presión: Evite presionar indebidamente a su pareja para que rinda sexualmente. En su lugar, céntrate en la intimidad y la conexión emocional. Explore formas alternativas de expresar afecto y placer que no impliquen necesariamente el coito con penetración.
✓ Infórmese: Dedique tiempo a informarse sobre la disfunción eréctil. Conozca las posibles causas, los tratamientos y los recursos disponibles. Con este conocimiento, podrá ofrecer un mejor apoyo y ayudar a su pareja a encontrar opciones de tratamiento.
✓ Anime a buscar ayuda: Anime a su pareja a buscar ayuda profesional de un profesional sanitario especializado en salud sexual. Existen varias opciones de tratamiento, como medicación para la disfunción eréctil, terapia, cambios en el estilo de vida y dispositivos médicos. Acompañarles a las citas puede proporcionarle apoyo emocional y facilitar las conversaciones abiertas con los profesionales sanitarios.
✓ Explore alternativas de intimidad: Adopte comportamientos que fomenten la intimidad y la cercanía sin centrarse únicamente en el rendimiento sexual. Esto podría incluir abrazos, masajes, caricias sensuales o probar nuevas actividades juntos. Refuerce la idea de que la intimidad es polifacética y no depende únicamente del coito.
✓ Mantenga un estilo de vida saludable: Anime a su pareja a adoptar un estilo de vida saludable, que incluya ejercicio regular, una dieta equilibrada, un sueño adecuado y técnicas de control del estrés. Estos cambios en el estilo de vida pueden mejorar la salud en general y también pueden tener un efecto positivo en la función eréctil.
✓ Sea paciente y comprensivo: La disfunción eréctil puede resultar frustrante y difícil para ambos miembros de la pareja. Practique la paciencia, la comprensión y la empatía con su pareja. Hágale saber que están juntos en esto y que le apoyará en su búsqueda de soluciones eficaces.
¿Qué puede hacer una mujer ante la disfunción eréctil?
Aunque la disfunción eréctil puede ser un problema difícil para las parejas, hay varias medidas proactivas que las mujeres pueden tomar para ayudar a sus parejas. Fomentando una comunicación abierta, reduciendo la presión, informándose, alentando la búsqueda de ayuda, explorando intimidades alternativas, promoviendo un estilo de vida saludable y siendo pacientes y comprensivas, las mujeres pueden desempeñar un papel crucial a la hora de ayudar a sus parejas a afrontar y controlar la disfunción eréctil. En última instancia, abordando el problema con empatía, aprensión y voluntad de explorar soluciones juntos, las parejas pueden fortalecer su vínculo y mantener una relación satisfactoria a pesar de los retos que plantea la disfunción eréctil.